Namasté en yoga

Namasté en yoga

El uso de la palabra Namasté en yoga o meditación, como forma de saludo, es muy habitual en estos tiempos.

La palabra Namasté proviene del lenguaje sánscrito, uno de los idiomas hablados en la cultura hindú, considerado como un idioma sagrado. Los hablantes de este idioma apenas se sorprenden o extrañan, ya que utilizan esta lengua para referirse a todo lo referido a los dioses.

Los hindúes introducen el Namasté en prácticamente todas sus oraciones. Su gesto, además de inclinar la cabeza, incluye cerrar los párpados para crear una conexión y visualizar a su espíritu interno.

La disciplina del yoga tiene sus orígenes en la India. El gesto de Namasté se interpreta como una expresión de saludo, despedida y buenos deseos. Significa, más concretamente, ‘me inclino ante ti’.

En la cultura del yoga actual, el Namasté se ha convertido en una de las palabras clave más utilizadas y que denotan mayor importancia. Se suele emplear al iniciar o finalizar una clase, al ver un vídeo sobre algún tema relacionado, en libros o revistas sobre yoga, etc. En definitiva, en todas las técnicas y prácticas que tienen que ver con el yoga o la meditación.

Una persona que saluda a otra mediante el ‘Namasté’, expresa que está pensando en ambos allí presentes, además de en el resto de personas que se encuentran a su alrededor. Este gesto reside en la divinidad, que se localiza en el chakra del corazón.

Este es uno de los motivos principales por los que debemos trabajar de forma profunda y consciente en equilibrar la energía de este cuarto chakra.

Significado de Namasté en yoga

El significado espiritual que se atribuye a la palabra Namasté en yoga es una forma eficaz de afirmar el conocimiento de la fuerza de la vida, la presencia divina que crea una conexión y la unión de las energías que existen en el universo.

La palabra yoga significa unión, por lo tanto el gesto de Namasté, se representa como una unión. Esto es el resultado de unir las manos en el pecho, la vuelta al corazón, la fusión de ambos hemisferios del cerebro, el vínculo entre ambos géneros.

Namasté en yoga

¿Por qué se usa Namasté en yoga?

Namasté se usa como muestra y expresión de respeto al encontrarse o despedirse de otra persona.

Su uso apareció hace miles de años en el continente asiático y, en la actualidad y gracias al yoga, su potencia se está extendiendo por todo el mundo, aunque solo dentro del ámbito yogui.

Existen dos razones principales por las que los instructores de yoga hacen uso del Namasté.

  • La primera es porque implica una señal de respeto, que es su sentido original.
  • La segunda es porque se ha convertido en una forma eficaz de introducir a los principiantes de la disciplina del yoga en las costumbres de oriente.

Una forma habitual de terminar una clase de yoga es pronunciando el Namasté. De esta forma, se convierte en un momento idóneo para contemplar todas las virtudes asociadas con el yoga, incluida la paz, la gratitud y la compasión.

Es muy importante resaltar que no es necesario ser hindú, budista o instructor de yoga para hacer uso del Namasté en yoga, meditación o cualquier otra disciplina similar. Lo más importante es respetar la intención que conlleva la palabra en sí.

Para utilizar el Namasté en yoga en solitario, hay que pronunciar la palabra en voz alta y sentirse agradecido con el cuerpo de uno mismo.

El significado que se le puede atribuir al Namasté en yoga depende, exclusivamente, de la persona que realiza la práctica. Por eso no hay que tener miedo en investigar y profundizar cualquier posibilidad que exista cuando se practica de forma solitaria.

Además, como ya sabemos, existen muchos productos que nos pueden ayudar a encontrar el estado de infinita paz, tranquilidad y armonía. Uno de los más destacables en los últimos tiempos son las lámparas de sal del Himalaya, un excelente aliado que te permite alcanzar ese estado mientras practicas el Namasté en yoga.

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