La incógnita de cómo dejar la mente en blanco siempre ha sido un tema de interés. Expertos han demostrado que esto no es del todo posible, pero existen técnicas para concentrarse en la respiración o en el sonido del aire. Esto hace que la corteza cerebral se desconecte en parte y sea más fácil pensar en cómo dejar la mente en blanco.
Además, dejar la mente en blanco puede traerte muchos beneficios relacionados con los chakras.
Aun así, hay algunos trucos para disipar esa cantidad de pensamientos que se desarrollan en tu cabeza. Así que si quieres saber cómo dejar la mente en blanco quédate hasta el final de este post.
Aprender sobre cómo dejar la mente en blanco es algo muy practicado en las sesiones de yoga, ya que es muy beneficioso para la salud mental y muy recomendado. Sin embargo, uno de los principales inconvenientes es que necesita que se le dedique mucho tiempo para conseguir resultados muy pequeños.
Existen numerosas técnicas que ayudan a relajar la mente, reduciendo lo máximo posible la cantidad de pensamientos que rondan tu cabeza:
- Realizar ejercicios respiratorios
- Practicar yoga
- Dar paseos por la naturaleza
- Dedicar un momento al día de relajación para ti mismo
- Tratar de centrarse en el momento presente
- Practicar mindfulness
- Escuchar música relajante
- Hacer ejercicios de visualización
- Llevar a cabo técnicas para relajar los músculos del cuerpo
Estas son algunas de las opciones que te permiten desconectar de tus problemas y preocupaciones. Es importante no obsesionarse con cómo dejar la mente en blanco, ya que puede tener el efecto contrario y atraer más pensamientos a tu cabeza.
A continuación, te ofrecemos una serie de pasos sobre cómo dejar la mente en blanco. La mayoría de ellos se centran en la respiración.
A través de esta práctica podrás alcanzar un estado de paz absoluto, en el que los pensamientos intrusivos no tienen lugar. Solo importa el momento presente.
Cómo dejar la mente en blanco: paso a paso
- Busca un lugar tranquilo, libre de elementos que puedan generarte algún tipo de tensión. También debe ser cómodo para que puedas tumbarte.
- Utiliza ropa cómoda y de colores neutros, preferiblemente blancos.
- Túmbate con el cuerpo en línea y los brazos extendidos con las palmas de las manos hacia arriba. Coloca las piernas relajadas y ligeramente abiertas. Se trata de la pose más adecuada para iniciarte en el proceso de cómo dejar la mente en blanco.
- Relaja todos los músculos y comienza a respirar profundamente. Como dejar la mente en blanco representa un reto difícil, debes concentrarte todo lo que puedas. Empieza a respirar profundamente, llenando tu abdomen de aire y aguántalo. Suelta el aire de manera progresiva vaciando el abdomen.
- Concéntrate en la respiración: es importante que te enfoques en sentir la respiración, en cómo tu estómago se hincha y se deshincha. Si haces bien este paso, llegarás a un punto en el que no pensarás nada más que en eso.
- Una vez hayas conseguido llevar a cabo el quinto paso, disminuye la fuerza de tu respiración y piensa en el color blanco sin ninguna forma.
- Ahora siente cómo tu cuerpo se va relajando, perdiendo toda la fuerza hasta sentirte realmente ligero y el color blanco es lo único que ves en tu mente.
- Mantén la mente pensando en el color blanco todo el tiempo que puedas, mientras tu cuerpo sigue relajado.
- Cuando notes que tu cuerpo necesita volver a la realidad, ve volviendo a ella poco a poco, de manera progresiva. Comienza a mover cada parte de tu cuerpo siendo consciente de cada una de ellas y a continuación incorpórate lentamente.
Como has podido comprobar, aprender cómo dejar la mente en blanco no es nada sencillo y requiere de bastante tiempo y paciencia. Debes probar diferentes técnicas y, sobre todo, intentar relajarte y no obsesionarte en el proceso.
Trabajar de forma consciente y continua en cómo dejar la mente en blanco puede ayudarte a conseguir en un tiempo récord tu objetivo principal.
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